jueves, 30 de junio de 2016

Orgullo LGTB

Como el 28 de junio se celebró el día Internacional LGTB y estos días estamos con las fiestas del orgullo, yo no quería ser menos y aportar mi granito de arena desde aquí.
Lo hago para que se siga viendo como habitual que existen muchos tipos de personas, ni más ni menos buenas por dormir, al fin y al cabo, en el mismo colchón, ambos sexos.

Ocurrió al otro lado del charco por el año 1969 en Stonewall, EE.UU, hubo una serie de manifestaciones espontaneas y violentas contra una redada policial que tuvo lugar el 28 de Junio en un pub conocido como Stonewall Inn.
Defendieron los derechos de los homosexuales ya que eran castigados con multas - que era lo de menos - o cárcel que podía llegar a ser hasta de por vida. 
Además eran considerados como enfermos mentales, cosa que en la actualidad siguen algunos neandertales pensándo.
Como métodos de cura les hacían barbaridades que iban desde: terapia emética, hipnosis, electroshock y lobotomias o incluso castrarlos.

Que barbaridades le causa el ser humano a su prójimo por ser diferente al él. Esto no es solo en el sexo sino en la religión, política y un largo etc... menos mal que se luchó contra ello para que no siga ocurriendo aunque quedan algunos que se toman la justicia por su cuenta y van haciendo el mal sin motivo alguno.

Han pasado los años y nos situamos en uno de los sitios mas importantes donde se celebra el orgullo con unas 2.000.000 de personas apoyando el acontecimiento en Madrid.
Ahora en las fiestas se reivindica el derecho al matrimonio, las familias homoparentales, respeto a las personas transexuales y su derecho legal al cambio de sexo, nombre y todo lo que conlleva, además de denunciar la trans/homofobia que aún tenemos.

Entre las actividades tenemos el pregón, actuaciones, la carrera de tacones, batalla de agua, tanga party, entre otras muchas y para terminar la marcha del orgullo.

Así que desde aquí os invito a todos a apoyar esta causa de la mejor forma posible para todos que es pasándolo bien y os aseguro que será en buena compañía.





                   Feliz Orgullo Gay, bueno lgtb :) desde la Roca más Diaamante del Mundo

lunes, 27 de junio de 2016

Exposición de Janire

Con motivo de las fiestas de San Juan nos hemos trasladado telepaticamente hasta el pueblo situado en el norte de España llamado Olaberria, en Guipúzcoa.
Sí, ya sé que las fiestas de este santo se celebran en gran parte del país con un gran hoguera y un sin fin de actividades dependiendo del lugar y sus costumbres.
Aquí han tenido una fantástica exposición de fotografía y pintura (en varias técnicas que van desde las conocidas y al alcance de todos como son el lápiz o carboncillo, pasando por cuadros hechos con bolígrafos, acuarelas, oleos...

En la exposición nos encontramos con cuadros hechos en una etapa más joven y fresca como vemos en la chica el pelo azul, que tiene una mirada que atrapa de lo expresiva y clara que es; pasando de un retrato a dos, en unos niños de corta edad que debió resultar muy emotivo para la artista cuando lo realizó por cariño que desprende en si mismo.

Estos son un tipo de cuadros donde se puede apreciar la presencia de colores muchos mas vivos que los realizados en el presente; nos encontramos con algunos abstractos de mucha elegancia, fragmentos del cuerpo (en este caso labios o una mano) y en acuarelas una catedral y una cúpula en la que observamos la soltura de la artista para hacer con muy poco, gran resultado clarísimo para todos.

Me gustaría comentar que si nos fijamos bien, encontramos la curiosidad que encarna esa juventud por experimentar, ya que pasamos por muchas técnicas y todas ellas muy bien defendidas.
Los retratos que suele hacer son de mujeres en su mayoría, de todas las edades, ya que se transmite en la infancia con una piel tersa como en el retrato de los niños, la joven del pelo azul entre otras y por otro lado nos encontramos a señoras donde el paso del tiempo ya ha dejado surcos en su rostro, realizados tanto en carboncillo como en bolígrafo, este último sobre papel que mide 100 x 70 cm y que es una de sus últimas obras.


También se deja ver un ápice de uno de sus artistas favoritos haciendo dos retratos de Salvador Dalí.
Ha sabido defenderlos muy bien haciéndonos llegar esa locura que tenía este gran maestro y por supuesto sin olvidar su inconfundible bigote.

Por otro lado encontramos obras realizadas en fotografía donde parece que el fotografiado está detrás de una persiana dejando ver solo algunas partes como si no  quisiera mostrase entero. 
En otras nos deja reflejado como el maquillaje no entiende de sexos haciéndonos ver que no existe un mundo en blanco y negro, entre otras.

Así que os invito a que conozcáis a esta gran artista, Janire Garro, y quedamos esperando su próxima exposición, a ver con que nos deleita.



Podéis saber más de ella en Twitter: https://twitter.com/garroluque y en Facebook: www.facebook.com/ianire.garroluque

jueves, 23 de junio de 2016

No todos somos iguales

Cada persona es un mundo, no sabemos por dónde puede salir, cómo reaccionar, responder y un sin fin más de incertidumbres.

Y es que en ocasiones esperamos cosas de los demás que ellos ni por asomo piensan o se les pasa por la cabeza que quisiéramos esto o aquello y como decía una joven que nunca sabía dar consejos "yo no sé lo que tú necesitas en cada momento porque no estoy en tu cabeza", y fíjate tú por donde que hasta de la persona que menos esperas aprendes algo y que razón lleva.

Todo esto viene porque días antes de mi trigésimo segundo cumpleaños -una que es de signo familiar como todos los cangrejos- me puse un poco "moñas" aunque vaya de durita por la vida y es que no es el simple hecho de cumplir y celebrar años, sino hacerlo en buena compañía por lo menos de los que quedan en cuerpo presente, y he aquí el quid de la question:
Es que la señora madre de una no es muy de celebraciones y ñoñerias, todo lo contrario a una. 
¿Qué fue lo que pasó? que al final me acabé mosqueando con ella por una estupidez en la forma de ver las cosas (por eso digo que cada persona es un mundo).
Lo importante de todo esto ¿qué es? pues que ella dio su brazo a torcer -a pesar de que, como buena tauro, es cabezona a más no poder- y yo con mi sensiblería pues también, con el consiguiente final de pasar un cumpleaños la mar de agradable, soplando las velas a temprana hora, -que para eso fui madrugadora en su día-, paseito por la playa aprovechando el comienzo del verano, comida íntima... felicitaciones de todos los seres queridos (haciéndome llegar su cariño de la mejor forma posible y con su mejor intención, unas más largas y profundas, otras más cortas y escuetas.
Algunas por las redes sociales ya conocidas (para que vamos a darles publicidad), muchas por teléfono, otras en persona... de amigos de la infancia, profesores, familiares de sangre y postizos, amigos de la otra punta del país...

Así que solo queda decirles a todos los que se han tomado un momento de su tiempo para acordarse de mí que: mil gracias por ello.
Y a los lectores que siguen este blog, gracias por dejarnos expresar con tranquilidad y respeto.

No olvidéis que con una simple palabra se puede cambiar la vida a una persona, así que intentad siempre hacer un mundo mejor al prójimo porque nos lo haremos a nosotros mismos.

lunes, 20 de junio de 2016

Lactancia materna

Llevo un tiempo escuchando y leyendo en las redes sociales y varios sitios más, opiniones y discusiones sobre este tema que a mí me parece tan sencillo, la lactancia materna de los bebés.

Se está armando mucho revuelo entre unos y otros, que si debe ilegalizarse, que si es indecoroso, que si debe hacerse en casa o en un baño, que si es verdad o mentira que lo han prohibido en algunos sitios, en fin.

Comer en la calle, en un banco, en casa, en una cafetería o donde nos de a cada uno la gana para mí es de derecho y perfectamente lícito, así que dar de comer una madre a un bebé me parece completamente lo mismo.

Algunas personas dicen que las madres no deben dar el pecho en público, sino en un baño o en lugares habilitados para ello.

Si lo pensamos y aplicamos a nosotros... ¿os parece normal llevaros el bocata o el plato de macarrones al water? a mí me parece que no, una cosa es cambiar el pañal en los servicios igual que nosotros hacemos allí nuestras necesidades, pero si comemos fuera de allí, lo lógico es que esos renacuajillos peloncillos también.

Me parece muy bien que haya salas de lactancia en centros comerciales y en otros lugares así, pero solo por la mera comodidad de las madres con sus peques, porque tengan pudor o por cualquier otro motivo que les ataña a ellas, pero no porque se les obligue.

Es que no entiendo por más que lo pienso y analizo dónde está el problema, ¿qué malo hay en eso, en serio? Yo no tengo hijos y no creo que los tenga, pero eso de que se les quiera quitar los derechos a las personas y para variar más aún a las mujeres es algo que me saca de mis casillas.

Si las madres no tiene problema ¿por qué han de tenerlo los demás? ¿Todo viene por el hecho de que se está enseñando un pecho? No entiendo que haya más por donde rebuscar.

Para empezar ver un pecho no tiene nada del otro jueves y además, por favor, que están dando de comer a una criatura, ¿quién ve otra cosa que no sea un recipiente con alimento?
No debe molestar a nadie, no debe ofenderle, no debe asustar ¿entonces?

Por mí que sigan dando el pecho donde haga falta y quien no quiera mirar que no lo haga, total, ¿para qué debería mirar de todas maneras?

¿Qué opináis sobre el tema? ¿Os parece bien o mal?

jueves, 16 de junio de 2016

Pasado, presente, futuro

A veces creo que me estoy perdiendo.
Casi he olvidado quién era, qué me gustaba, 
cómo pasaba el tiempo, qué me hacia sonreír, 
cuáles eran las cosas que me entretenían y me sacaban las sonrisas.

He olvidado la pasión y las ilusiones, 
vivo preocupada por el pasado, 
por el presente y por el futuro, 
por los amigos y la familia, 
por mi pareja y por mí
y mi mente no me deja tregua.

¿Dónde ha quedado aquello? 
Todo lo que me hacía estar las horas muertas sin preocuparme de nada mas?

Dicen que el pasado siempre es mejor 
-depende de las opiniones, supongo-.

Antes miraba blogs de repostería,
me quedaba embobada mirando pasteles, tartas y dulces, 
pasaba de unos a otros a través de mil enlaces.

Veía paginas y paginas de lenguas muertas, 
idiomas antiguos, culturas eternas, 
perdidas por el tiempo, empeñada en memorizarlas.

Me interesaban las religiones raras, países desconocidos, 
hierbas, remedios, plantas milagrosas,
sanaciones mentales, corporales, llenas de poder y de magia.

Antes era música de fondo y la luna,
lápiz y papel, 
el cielo, las estrellas y yo. 

Ahora es agobio y ansiedad, 
perderme a mí misma en la edad madura y adulta.

Si solo pudiera volar...



lunes, 13 de junio de 2016

Reseña: Te deseo tanto

He de confesar que cuando la autora, Andrea Moralli, me recomendó su libro, no tenía ni idea de lo que me iba a encontrar al empezar a leer las primeras páginas.

Se trata de un libro erótico, pero al describirlo se nos queda corto usar esa palabra. El relato no es nada light, es absolutamente directo y explícito, se habla de amor, pero más que nada de sexo.

Si hay algo que quiero resaltar es que me parece muy bien que un libro así se escriba porque la libertad de expresión y sobre todo en la literatura, abre muchas mentes cerradas y es interesante que precisamente sea una mujer la autora de semejante temática que siempre se le ha achacado más al género masculino.

La historia es aparentemente sencilla y con pocos personajes, pero que después va tomando una complicación donde los protagonistas empiezan a confundirse creando un desconcierto porque dudas de si ficción o realidad dentro de la historia.

Se diferencian bien los dos mundos en el argumento pero llega un punto en el que la autora te hace dudar y como no quieres quedarte con semejante incertidumbre, sigues leyendo para ver el desenlace y quedarte tranquila.

Cuando por fin llegamos a esa parte y crees que vas a encontrar todas las respuestas te encuentras con un final tan abstracto y "libre" podríamos decir, que te quedas un rato pensando en ello.

Por un lado tenemos algo de final feliz, pero por muchos otros me he quedado con ganas de saber más de algunos personajes así que la autora podía pensar si hacer una segunda parte. Yo ahí lo dejo caer.                

No puedo terminar la reseña sin hacer una observación más profunda de la evidente cantidad de sexo que aparece en el libro. 
Si estáis "contentillos" y "contentillas" cuando vayáis a leerlo os vendrá al pelo y sino lo estáis ya os digo yo que lo estaréis.

Página sí y página también, tenemos escenas sexuales de todos los gustos y colores, con amor, con amigos, casi siempre los sujetos son chico y chica heterosexual, aunque también tenemos un escarceo lésbico - no muy explícito, por cierto, imagino que la autora es hetero- y hasta una orgía. 
Todo ello suele estar regado con cantidades ingentes de vino blanco y otros alcoholes, además de drogas medianamente lights.

Conclusión, que si os gusta la temática y no os asustan los relatos de sexo muy explícito os lo recomiendo. Seguramente os gustará porque además no es demasiado extenso y quizá hasta se os haga corto.

Muchas gracias desde aquí a su autora por la oportunidad de leerlo y espero que os guste mucho el libro. Ya sabéis, a comprarlo por Amazon que Andrea os lo agradecerá un montón.

¿Lo habéis leído? ¿Os gustó? Me encantaría saber que os ha parecido a vosotros.

jueves, 9 de junio de 2016

Día de examen

El otro día tenía examen de Derecho de la protección social y cuando faltaban tan solo un rato para hacerlo pensé que me apetecía escribir este post y contar las peripecias de un día de examen.

Si tengo suerte de que sea por la tarde, tengo la costumbre de ir pronto a la universidad y quedarme en la biblioteca todo el día, concentrada, estudiando y pensando únicamente en la asignatura que tengo por delante.

Suelo estar allí desde las nueve de la mañana más o menos y como soy de las primeras, normalmente veo llegar a todo el mundo.

Una cosa que me llama la atención es que ya puede estar la biblioteca vacía que siempre viene el de turno y se sienta o en la mesa de al lado o en la de delante o detrás de mí. Por favor, ¿es que no hay más sitio en tooooda la sala?

Hay estudiantes la mar de curiosos, está el típico que llega con sus libros y apuntes llenos de colorines, la botella de agua y todo bien preparado.

Luego van los que estudian con música y no se quitan los cascos en toda la mañana, la típica que no para de sonarse la nariz porque estamos en época de alergia o si es invierno anda con un resfriado del copón.

Seguimos con los que leen una linea y ya están comprobando el móvil, los que se olvidan de apagarlo y les suena en medio de la biblioteca y todos le miramos con cara de asesinos en serie.

Los que no paran de salir a fumar y vuelven con un pestazo a tabaco que hay que abrir las ventanas, los que van al baño cada media hora pero siguen bebiendo su botella de agua mineral de 2 litros como si no hubiera mañana.

Los que comen chicles, caramelos, hacen ruidos con la boca, tosen, hacen jaleo con la silla y la mesa, las que no paran de tocarse el pelo y mis favoritos, los que llegan con su portátil, su tablet y su móvil y se ponen a hacer algo que yo no atino a saber pero que parece muy profesional y muy importante.

En fin y luego está el bibliotecario que no quita el volumen al teléfono, que si suena lo coge y se pone a hablar tan tranquilo, que no para de levantarse a coger libros y organizar y limpiar las estanterías, que está venga a darle al teclado y que habla en tono de conversación normal cuando alguien se le acerca a preguntarle algo.

Yo suelo comer allí y sigo estudiando hasta que llega la hora del sacrificio. Treinta minutos antes de que nos pasen al salón, allí estoy yo paseando por el patio de un lado a otro.

Me encomiendo a todos los santos habidos y por haber que recuerdo en ese momento y cuando ya me he dicho a mi misma mil doscientas veces y una más que me lo sé, reviso mis bolsillos para asegurarme de que llevo todo lo que pueda necesitar, bolis, pañuelos de papel, caramelos, el DNI, el móvil en silencio, el carnet de la universidad...

Entonces empieza a llegar la gente y comienza la parte interesante y curiosa. En un momento se llena el recinto de alumnos desquiciados que parecen ir al matadero.

A mí me gusta mirarlos, observarlos, contarlos y repasarlos incluso. Cada uno es de su padre y de su madre, está claro -o de sus dos padres o dos madres, que ya estamos en tiempos modernos y hay que adaptar los dichos y refranes -.

El caso es que puedes ver al típico pijito con pantalón corto, polo de marca y zapatos sin calcetines, de marca también, of course.

Al camarero, obrero, oficinista etc. con uniforme que viene directamente del trabajo y allí tiene que volver con su certificado en mano en cuanto acabe.

Los ves con pantalones largo y camisa de manga larga, con pantaloncillos de deporte y zapatillas, chicas con vestidos y taconazos además de tres kilos y medio de chapapote, otras más de sport y con el pelo recogido distraidamente.

Unos fumando, otros mirando el móvil, otros que se sientan en el bar de al lado y se toman una tila o un refresco de cola para inspirarse.

Los hay que no conocen a nadie y se ponen en una esquina aislados, los que llegan y ven a su grupito y se ponen a contarse su vida, los que directamente comentan apuntes en mano si se saben esto lo otro que seguro van a preguntar.

Están los que no sueltan el libro hasta el segundo antes de enseñar el carnet y que salga por la impresora su examen, los que llevan un boli y nada más en las manos, los que cargan con códigos y programas, los que llevan el estuche, la calculadora científica, la regla y hasta a su tía por las patas, incluso las que van con bolsos como para la playa o mochilas para salir de acampada.

Tenemos a los pobres vírgenes, asustados, de 18 años y que van a su primer examen de la universidad, los perros viejos de 70 que está aburridos en casa y se ponen a estudiar y los más abundantes de entre 25 y 55 diría yo, por poner una franja de edad.

Yo me fijo en todos porque la gente y sus manías o reacciones y costumbres me parece apasionante.

Confieso que todo el proceso es emocionante, de verdad, la adrenalina que sientes desde el día anterior cuando la presión y los nervios te hacen memorizar, por fin, todo eso que lleva meses resistiéndose, ese calor, ese frió, esas manos que sudan, ese estómago que te hace cosquillitas - o retortijones que leche, cada cosa por tu nombre - y saber que en cuento salgas serás por un rato la persona más feliz del mundo, independientemente de como te salga el examen.

Piensas, tanto agobio, tantos nervios, tanto tiempo dedicado a estudiar y de perderte vivir ¿vale la pena?

Para apreciar lo bueno hace falta saber como es lo malo y ese estado al terminar el examen es indescriptible. Ya intenté yo contarlo en otro post y no voy a repetirme.

Solo decir que aunque refunfuñe en el fondo me gusta y que el día que termine la carrera no lo podré evitar... tendré que empezar otra.

lunes, 6 de junio de 2016

Los cuatro estados de una persona

Cada persona tiene un carácter, una forma de ser, de expresarse y por tanto requiere del mundo y su alrededor una serie de necesidades.

Hay algunos que necesitan momentos de soledad para reflexionar sobre las preguntas que le van aconteciendo en cada instante, pero esa soledad no tiene porque ser oscura, fría y vacía sino todo lo contrario, una soledad que te inspire a seguir adelante, que te pueda maravillar en el laberinto hacia la respuesta y con luz porque siempre se ven mejor las cosas de día que de noche donde todo parece mas difícil y complicado.

A todos nos gusta también estar rodeados de gente, sobre todo si es de calidad aunque más vale tener poca y que no se vayan a la mínima de cambio que mucha y en cuanto aparezca la primera nube salga corriendo por riesgo de lluvia.

Puede parecer que en ocasiones el viaje se vislumbre infinito, pero no debemos temerle sino todo lo contrario, dividirlo en etapas para así poder marcarnos metas que conseguir a corto plazo y siempre permanecer motivados para llegar donde nos propongamos.

En los lados nos encontramos la representación de la soledad luminosa y amplia sin obstáculos para poder seguir avanzando y arriba y abajo los momentos rodeados de gente que aportan seguridad y las que no, enlazando los cuatro por una espiral de pétalos con un principio y fin.

Al fin y al cabo la vida con más o menos gente a tu alrededor es un camino que cada uno lleva a su ritmo, solo -como vinimos al mundo- aunque tenga estaciones en las que se suban y bajen personas hasta final del trayecto.

La obra es una composición que representa el mundo de una persona "x" interpretado y pintado por la artista.
Aunque la foto no hace honor al cuadro, yo he tenido la suerte de ver la obra en persona y puedo asegurar que se aprecia un gran trabajo, sobre todo destacaría las zonas verdes, con perfectas pinceladas y mucha calidad en las partes rocosas y de montaña al igual que en el agua.

Una obra que encontraremos muy pronto expuesta, es parte de una serie llamada "Mundos". 

El cuadro está realizado en el año 2015. Técnica Guache y Acrílico.
Para saber más sobre la artista: https://twitter.com/pincelligero 
                                                           https://t.co/p76JrLzGnE
                                                           https://t.co/LqqeorgPw8

jueves, 2 de junio de 2016

Eras

Eras un osito amoroso... pero solo eras y lo digo porque las máscaras las utilizabas muy bien. Parecía que hubieras nacido para el teatro, donde te mueves entre bambalinas para actuar y regalarle el oído a quien te escucha.

Algunos días, cansado de actuar, te mostrabas realmente como eres, no parecía que fueras tan feliz como los cuentos que vendías a tu publico.


A veces te encuentras en el camino con actores de mucho más nivel que el tuyo y te sientes pequeño al actuar a su lado y te ves que eres simplemente un cero a la izquierda.

Pena, pena de sentirse un cero y más aún de volver a la realidad y no ser feliz porque las historias que se sueñan son solo eso, historias.


Tienes madera de guionista y sabes dar lo que tu público quiere en cada momento pero cuando ya no sabes como seguir la tragi-comedia, abandonas y sales por la puerta trasera, dejando a tu público esperando la continuación sin saber que se ha puesto un punto y final porque la audiencia ya no te da lo que tu necesitas.


Ahora buscas una clientela más exquisita donde poder hurgar para escribir sobre hechos reales.
Real como la vida misma es ver que eras, eres y serás barro moldeable a tu antojo para asemejarte al resto de los que te rodean.

Asemejarte y tanto a lo que tú odias y aplicar el mismo castigo que te dieron a ti es la forma de demostrar al prójimo lo mucho que lo aprecias.


El prójimo se cansó de ver y ser participe de los espectáculos que sin saber cómo ni por qué se vio involucrado.


Involucrado en una película de fin de semana que acaba, como no, con un final de lo más deprimente.


Deprimente es que todo el mundo al final se de cuenta de que solo ERAS.